Cada una de las Sedes de nuestra Facultad tuvo durante el Turno de mayo su primera experiencia en la realización de Mesas de examen bajo la modalidad virtual. En el caso de la Tecnicatura en Administración de la Sede La Paz, esta posibilidad permitió contar con una nueva egresada.
Romina Siano se convirtió en la primera generación de su familia con título universitario. Durante su carrera, atravesó dos embarazos y un principio de ACV producto de un pico de estrés. Se puso como meta para recibirse la mesa de mayo y la virtualidad le permitió llegar a su logro en el tiempo que se había fijado desde finales del año pasado.
Tanto ella como el Prof. Francisco Mathieu, que le tomó la evaluación final de la cátedra Planificación Estratégica, remarcaron la importancia que tuvo el acompañamiento de la Sede, docentes, estudiantes y familiares. Además, pusieron énfasis en el compromiso de la Facultad y la coordinación entre los distintos claustros para llegar a buen puerto, acompañando el nuevo desafío de pensar la educación desde lo virtual.
Paralelamente, vale destacar que en la Sede se constituyeron once mesas, con igual cantidad de profesores, que pudieron evaluar en tiempo y forma mediante diversas estrategias digitales. En total, de los 23 inscriptos, 14 estudiantes asistieron a su examen.
Como balance de lo sucedido, la Responsable de la Sede La Paz, Evangelina Quartino, compartió la siguiente reflexión:
En tiempos de excepcionalidades, se garantizan los derechos de los estudiantes
"El abordaje de la evaluación de los aprendizajes resulta un proceso sumamente complejo en la medida en que se trata de una práctica social anclada en un contexto que impacta de múltiples maneras en los distintos actores involucrados, ya se trate de alumnos, docentes, instituciones educativas (...)". (ANIJOVICH, 2010)
Dice Foucault en su Arqueología del Saber que no es fácil decir algo nuevo sobre un asunto cualquiera, que no basta con tener las intenciones de que las cosas sucedan, también es fundamental gestionarlas, administrarlas y dejarlas en actores claves que puedan ofrecer sus experiencias y saberes para hacer comunidad educativa.
Los instrumentos, como todos sabemos, deben permitirnos recolectar información sobre el proceso de aprendizaje y el proceso de enseñanza (que en este caso, se trata de evaluar a estudiantes que han pasado por instancias de enseñanza presenciales), entendiendo que existen múltiples factores (conectividad, tiempo, entre otros) y actores (docentes, estudiantes, FCG) que van a influir sobre la propia instancia de evaluación.
Si bien podemos disponer de variados instrumentos (tipos de instrumentos de evaluación), e innumerables listas de clasificación y formatos; aquí la variable tiempo nos ha exigido tomar ciertas determinaciones y definiciones institucionales, en el marco de una situación y contexto particular.
Los modos en los que abordamos el saber, la transmisión, la enseñanza nos atraviesan en escenarios acostumbrados, y pocas veces trasciende esa mediación por el empleo de las TICS, de los canales de Comunicación a través de plataformas. Argumentos que ya escuchamos sobre las precariedades y las ausencias materiales, fueron reemplazadas por posibilidades, por encuentros y pautas claras sobre las miradas de una evaluación que no es acreditación, sino con el lugar de la producción del conocimiento y lo propio de la retroalimentación formativa. Esto llevado al plano del compromiso en la relación pedagógica que invita a indagar también los datos que nos arroja la realidad de nuestra semana de mesas de examen en la sede La Paz-Tecnicatura en Administración.
Como responsable de sede, deseo hacer extensiva el agradecimiento por la disposición de los tiempos en plural, de los saberes y de la experiencia, al Prof. Gustavo Nuñez, Prof. Daniel Nolla y a Vanesa Leites, quienes pensamos en interrogantes abiertos y flexibles para mediar con este nuevo desafío propuesto.